Per Kirkeby
"Per Kirkeby"
El Guia, Espagne, Avril/Mai 1992, p.92
El Centro Nacional de Arte Contemporáneo, llamado Le Magasin, en Grenoble,
es un lugar propicio para las grandes exposiciones, para la presentación
cuidada y al mismo tiempo monumental de una obra. Este espacio, donde predomina
una luz cenital, resulta ideal para presentar el artista de origen danés
Per Kirkeby, sin renunciar a ninguna de las facetas de su arte. Porque todo
se muestra: pintura, trabajos sobre papel, esbozos, esculturas en bronce o
monumentos de ladrillo. Y el catálogo evoca asimismo la importancia
de otros medios: la escritura o el cine.
Multiforme, su obra, sin embargo, no resulta incongruente. No puede ser de
otro modo, no puede limitarse a un solo material, ya que es tensión,
intento de captar el porvenir. Y es por esto que ejerce tanta fascinación
sobre el espectador. Pero esta fascinación pasa primero por una especie
de desbandada, porque frente a sus obras, que parecen realizarse al mismo tiempo
que las miramos, es difícil no sentir una amenaza.
Resulta perturbador presenciar una aparición, comprender de manera confusa
que lo que cuenta, no es un resultado, una determinación formal, el
reconocimiento de una imagen, sino algo que viene antes, algo que es energía
primaria, elemental, diría Bachelard. Kirkeby es además geólogo, ¿y
qué hay de extraño es ello ? Al igual que Cézanne, que
no podía pensar el paisaje sin ver lo que escondía, sin sentir
su geología. A Kirkeby le gusta evocar el misterio de la creación,
el momento cuando ésta se mete en movimiento, cuando la materia es a
la vez dependiente e independiente del gesto, de la conciencia, cuando se deja
ir su propio aire. El vértigo se apodera del espectador. El artista
a la vez invoca el acontecimiento, el nacimiento del imagen a partir de la
materia, el mito de los origenes, y es espíritu de este fin del siglo
XX, época en que el hombre sabe que ya no tiene control del mundo. Asociado
al movimiento Fluxus, Kirkeby es indudablemente una de las figuras contemporáneas
que con gran acierto ha realizado una obra a la vez intemporal y reflejo de
su tiempo.
Catherine Grout